Lamento – Juan 19:30

“Cuando Jesús hubo tomado el vinagre, dijo: Consumado es. Y habiendo inclinado la cabeza, entregó el espíritu.”

Sabemos que en Cristo la creación ha llegado a su consumación. Sin embargo, nos nubla el dolor, sudamos sangre y vivimos crucifixiones… Por esto te pedimos la fuerza de tu amor, para que podamos ser participantes de la Vida entregada mansamente en la cruz. Gracias a ella reconocemos que se han terminado en nosotros las vanas tentativas de gestionar por nuestra cuenta el dolor. Nos arrepentimos por haber tomado tantas veces esta opción. Queremos mirándote a ti acoger el comienzo de la posibilidad real de vivir en paz que nos brindas, siendo agentes de la reconciliación de Dios para con el mundo. Sin escaparnos así del sufrimiento, pero reconociendo que tú has tenido la última palabra. Queremos que tu palabra sea la nuestra al transitar por este valle oscuro.

Sugerencia
Moviliza con círculos amplios tus hombros y tus caderas, moviendo los brazos y las piernas. libremente. Juega con la luz, ¿En cuál lugar de tu espacio entra un rayo de sol? Colorea de sol tus manos, tu nuca, tus pies… juega o tan sólo siente el calor que da.